Con la devoción que les caracteriza, la comunidad católica de Huara celebró durante tres días a la Virgen del Perpetuo Socorro. La parroquia Santísimo Redentor acogió a cientos de fieles que renovaron su fe y oraron por el bienestar de la comuna y sus habitantes.
La celebración culminó con la procesión y el llamado a alferado para el 2019, labor que asumió Mónica González junto a su familia.
Los actos comenzaron con la misa de bienvenida que ofició el párroco huarino Erico Gauer, oportunidad donde se entregó la bendición a los integrantes del Centro Hijos de Huara Residentes en Arica quienes por más de 30 años están peregrinando desde la puerta norte de Chile al terruño que los vio nacer.
El Obispo de Iquique, Guillermo Vera Soto, fue quien realizó la misa solemne donde destacó la fe de la comunidad huarina y el cariño por su terruño, poniendo como ejemplo al grupo que cada año vuelve desde Arica a honrar a la madre del Perpetuo Socorro.
En sus palabras invitó a mantener la fe para que cada año sean más los que se congreguen en torno a la festividad, “Así como esta parroquia sigue en pie pese a los terremotos, ustedes mantienen el espíritu de fe y fiesta. Veo a niños, jóvenes, adultos mayores, bailes, gente que ha viajado. Ustedes que vuelven a su pueblo, al lugar de acogida donde les tocó nacer y crecer, lo hacen porque quieren este lugar y mantienen la fe”, mencionó el pastor de la diócesis.
Al concluir la misa, en la plaza frente al templo, los bailes religiosos danzaron y cantaron el alba mientras los fuegos artificiales iluminaban el cielo anunciando la llegada del día de la fiesta de la santa patrona del poblado, en tanto devotos y peregrinos compartían ponche, chocolate caliente y dulces preparado por el comité de la fiesta.
El último día de festejo estuvo reservado para la misa de la mañana y la retreta en la plaza del Santísimo Redentor, donde hubo reparto de bebidas, empanadas y golosinas para la concurrencia.
En la tarde la imagen de la madre protectora salió en procesión por la cales de Huara y al retornar al templo se ofició la misa de despedida con el llamado para alférez 2019, tarea que asumió Mónica González junto a su familia.